Diego López y un posible retorno a Peñarol: “Si me llaman es muy difícil que diga que sí”

“Una lástima que un equipo tan grande se maneje así, pero no sorprende; les pasó a Bengoechea y a Gregorio”, dijo sobre el llamado a Alonso.

Deportes 29 de marzo de 2020 Portal Rivera mi Ciudad Portal Rivera mi Ciudad
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Diego López sigue en cuarentena en Brescia, una ciudad al norte de la región más afectada por el coronavirus en todo el nombre; Lombardía. No obstante, dejó un rato de lado el difícil momento que atraviesa Italia en particular y el mundo en general para hablar de fútbol con el programa Locos por el Fútbol, de FM Del Sol.

Tras recordar su difícil comienzo al frente de Peñarol, a mediados de 2018, recordó el Campeonato Uruguayo que ganó, el muy buen primer semestre que hizo y el aporte de los futbolistas. No obstante, cuando fue consultado por un posible retorno en el futuro, reconoció que difícilmente vuelva a filas carboneras.

“Me quería sacar las ganas de ir a Peñarol y dejé de lado muchas cosas por hacerlo. Hice al revés de todos; estando en Europa me fui a Uruguay y fue algo increíble, pero no deja de ser algo un poco loco. Lo hice con ganas, pero ahora si me llaman es muy difícil que diga que sí. Ya me saqué las ganas de estar donde quería estar. Ahora es trabajo y tratar de quedarme por estos lados, que es donde más me gusta”, expresó.

El desarme del plantel y la llamada a Diego Alonso

Esas ganas de estar en el club del que es hincha lo hizo quedarse pese a que le desarmaron el plantel de cara al segundo semestre de 2019. “Pedimos jugadores y como vimos que no se podían traer, lo último que pedimos fue que se hiciera el esfuerzo por retener a Cristian Lema. Y después por no vender a los dos juveniles (Brian Rodríguez y Darwin Núñez). Se vendieron los dos con el período de pases cerrado y después no se podía traer más jugadores. En ese sentido no se hicieron bien las cosas. Se desarmó y el equipo lo sufrió”, narró.

“El razonamiento que hicimos con los dirigentes antes de vender a los juveniles fue que teniendo a los grandes bien, podíamos ganar el Campeonato Uruguayo. Después se lesionaron los grandes, se fueron los juveniles y el período de pases estaba cerrado. Yo podría haberme ido, pero no quise irme porque fui a Peñarol con las ganas de vivir el día a día, cosa que como jugador no pude hacer. Tampoco me fui porque estaba bien con los jugadores. Si hubiese sido egoísta, me iba y quedaba bien yo, pero no me interesaba quedar bien. Quería ganar y estaba convencido de que se podía”, recordó.

“También podría haberme ido cuando hablaron con otros entrenadores, pero no lo hice porque estaba donde quería estar”, dijo, y confirmó haber recibido el llamado de Diego Alonso advirtiéndole que lo sondearon desde el club para asumir la dirección técnica. “Es verdad. Somos amigos con el Tornado”, comentó.

“Es una lástima que un equipo tan grande se maneje de esa forma, pero no me extraña porque les ha pasado a Bengoechea y a Gregorio Pérez. Yo, que hasta que fui a Peñarol no me conocía nadie como entrenador, hasta ese momento no había tenido historia en Peñarol y podía esperar cualquier cosa. Sabía que iba a ser todo más difícil para mí, pero me sentía pronto y con confianza de lo que podía hacer”, dijo.

El mérito de Pellistri: “Cuando los jóvenes tienen calidad y personalidad, los pongo”

Una semana atrás en el mismo programa, Diego Forlán fue consultado por Facundo Pellistri y aseguró que “el mérito por animarse a ponerlo fue de Diego López”. Al respecto, el Memo contó que en el último partido del Brescia también hizo debutar a un zaguero de 17 años, algo que no es habitual en Italia.

“Cuando veo a un joven que tiene personalidad y hace las cosas que le ves hacer en un entrenamiento, agarra la pelota y no tiene problemas en jugar, por más difícil que esté el momento lo pongo. Me pasó con Busquets, de hacerlo jugar con 17 años, y Matías de los Santos un poco más grande. Cuando tengo jóvenes que tienen calidad y personalidad para jugar, los hago jugar”, manifestó.

“También nos pasó con Brian Rodríguez. En los primeros partidos anduvo muy bien, después bajó un poco, cosa que fue normal, lo mantuvimos y después terminó jugando poquísimo porque se fue enseguida. Teniendo compañeros grandes e importantes como hay en Peñarol, como el Lolo, Cebolla, Marcel y Guzmán, los jóvenes tienen un respaldo mayor y es más fácil que tengan confianza”, destacó.

La diferencia en infraestructura: “No tiene comparación con nada de lo que hay en Uruguay”

Respecto al cambio de pasar a dirigir en Italia, fue claro: “Ahora estoy en el Brescia, un equipo del que sabía que estaba peleando abajo, pero si ves la infraestructura que tiene, las canchas de entrenamiento, la concentración y el estadio, no tiene comparación con nada de lo que hay en Uruguay. Nosotros estamos mal pero nuestro estadio se llena. Después vamos a jugar al de la Juventus y también se llena. Te cambia todo el entorno”.

“En el Brescia tenemos cuatro canchas de entrenamiento, y al lado cuatro más para los juveniles. Es un complejo enorme. Peñarol, si bien tiene un estadio hermoso e increíble, tiene una cancha y media para entrenar. La infraestructura que tiene el Brescia no la tiene Peñarol, que es un equipo 10 veces más grandes. Acá vas a jugar a estadios espectaculares. Es mucha la diferencia con las canchas en Uruguay”, manifestó.

“En Uruguay tratás de hacer un fútbol dinámico y a dos toques, pero muchas veces no podés entrenar a dos toques porque tenés una cancha sola y si llueve no la podés utilizar. Perdés muchos entrenamientos y eso acá en Italia no pasa. Son grandes diferencias y todo eso suma”, concluyó.

Fuente : FútbolUy

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