La trama oculta detrás del crimen de Ocean Park

Nunca imaginó que sería ella la que iba a denunciar que su amigo estaba desaparecido, aquel docente jubilado al que describía como “bueno, solidario y noble”. Tampoco imaginó que, ese 26 mayo de 2019, lo iba a encontrar en su casa del balneario Ocean Park asesinado.

Corría el 21 de mayo de ese año y el docente estaba en la terminal de la ciudad de Pan de Azúcar. Se trasladó hasta ahí en su auto para ir a buscar a un hombre que había llegado en ómnibus desde Minas y con el cual tenía una relación sentimental. La idea de ambos era pasar unos días juntos en la residencia de Ocean Park.

Cerca de las 12:30 se dio el encuentro. El hombre subió al auto del docente y desde ahí se fueron al centro de Pan de Azúcar a recorrer y después a la casa del jubilado. Estuvieron juntos en la vivienda dos días.

El 22 de mayo pasearon por el centro de Punta del Este, pero la madrugada siguiente iba a ocurrir la tragedia. Aquel hombre que había ido desde Minas a ver al docente y compartir unos días juntos decidió golpearlo, quemar su cuerpo y asfixiarlo hasta matarlo.

Luego le robó una tarjeta de crédito, sus documentos, un televisor, un equipo de música y su auto. El asesino dejó a la víctima muerta dentro de su propia casa y huyó. Pero no terminó ahí: durante los dos días siguientes sacó de la tarjeta del docente jubilado unos $ 90 mil en distintos lugares y fue a Durazno a visitar “a su novia”, según la sentencia judicial a la que accedió El País.

En la terminal de ómnibus de ese departamento abandonó el auto del hombre que había matado y luego de ver a su pareja viajó a Montevideo. Pero el periplo del asesino terminó el 26 de mayo, tres días después de haber matado al docente jubilado en Ocean Park.

Ese día tomó un ómnibus para viajar a Minas, pero la Policía lo estaba esperando para detenerlo. En su celular se encontró una conversación del homicida con su novia. “No pienso, directamente… y ya está; si pienso, me revienta la cabeza”, confesó.

El crimen del docente jubilado cayó en manos de la Fiscalía de 1ª Turno de Maldonado, cuyo titular es Sebastián Robles. El pasado viernes se conoció la sentencia sobre el caso en el que se logró probar que el autor del homicidio tenía una relación sentimental con la víctima, que se vieron en Ocean Park y que el crimen ocurrió para efectuar un robo.

El asesino fue condenado a 26 años de penitenciaría por un delito de homicidio muy especialmente agravado, ya que el crimen se produjo con la intención de robar a la víctima.

FUENTE EL PAIS