"Un gran trueno" y temblaron las paredes: así vivieron el sismo en Florida los vecinos de la zona

Las personas que estaban en el lugar del temblor pensaron en diferentes hipótesis que iban desde un avión caído a una tormenta eléctrica o la explosión de una garrafa

Nacionales 08 de mayo de 2021 Victor Camargo Victor Camargo
1620502208847

"Sentí en los oídos como una vibración muy importante y movimiento en los pies que habrá durado un segundo", contó el ingeniero Pablo Bonasso de la estancia Santa Clara, ubicada en el departamento de Florida, donde en la mañana de este sábado hubo un sismo de 3,8 en la escala de Richter.

El productor rural primero pensó que podía ser un ataque de pánico y como fue corto siguió rumbo a las mangas de ganado. Pero en el camino le empezó a sonar el teléfono con llamadas de los trabajadores que estaban en el casco del establecimiento: preguntaban qué había pasado, y si había explotado algo. 

En ese momento Bonasso se dio cuenta de que había sido un pequeño temblor y empezó a recorrer el campo para buscar a los trabajadores. Todos lo habían sentido, pero nadie sabía que había pasado.

Horas más tarde fue confirmado por la geóloga Leda Sánchez que esta mañana, alrededor de las 9 horas, hubo un sismo en Florida. El fenómeno que se sintió en distintas localidades del departamento quedó registrado en las cuatro estaciones en las que miden sismos en Uruguay, ubicadas en la estancia presidencial del Parque Anchorena en Colonia, en Paso de Los Toros (Tacuarembó), en Aiguá (Maldonado) y en Montevideo.

Bonasso contó que algunos trabajadores percibieron que se movía la estructura de los corrales y se pusieron bajo resguardo. Por su parte, quienes estaban adentro de la casa relataron que temblaron las paredes.

Sin embargo, no fue más de un segundo y no se registraron ni caídas de árboles ni de construcciones, según afirmó. Tampoco se movieron objetos dentro de la casa, ni mesas ni lámparas.

El cura Juan Andrés "Gordo" Verde también se encontraba en las inmediaciones del epicentro del sismo y relató cómo lo vivió él. "Yo en un momento me imaginé que se había caído un avión. Se sintió como un ruido fuerte, pero no sentí una explosión, afirmó a El Observador. "Sentí un temblor precedido por un ruido fuerte", agregó.

Verde explicó que con quienes estaba todos lo vivieron distinto y a continuación comentaron hipótesis sobre qué podía ser. En esa charla que tuvo el cura junto a otras personas, según dijo, por el ruido uno pensó que había explotado una caldera.

"¿Explotó una garrafa?"

Violeta Carrau estaba sola, su esposo había salido para el centro temprano. Cuando se sentó en el sillón del living a mirar las noticias sintió "tres truenos gigantes, una cosa envolvente".

Carrau lo describió como un ruido espantoso y un temblor. Sentada con los pies en el piso de baldosas sintió como "si abajo de la tierra vibrara algo". Los vidrios también vibraban.

Al principio pensó que podía haber explotado una garrafa. Salió afuera y miró para todos lados buscando el humo, pero no vio nada. "Puse la radio y empecé a escuchar todo tipo de divagues: que había sido un meteorito, un cohete de no se qué, hasta que alguien dijo que había sido un sismo en el epicentro de Santa Clara, que queda a unos 15 minutos de acá", relató.

Carrau también afirma que no se cayó ningún objeto y que en su casa tampoco hubo roturas.

"Un trueno largo"

Daniel Tenca es otro vecino de la zona. Si bien no se encontraba en el lugar recibió un llamado de un capaz de estancia que le comentó haber sentido "como una explosión". Tenca pensó que era una broma, pero después habló con otro productores que también le contaron sobre "un movimiento importante". 

Diego Scremini es veterinario y trabaja en la estancia Santa Clara. En el momento del sismo estaba en el campo acomodando el ganado.  "Lo único que sentimos fue como un trueno largo. No sentimos otra cosa", contó.

Un trabajador que estaba arreglando un bebedero para los animales sintió que se movía el agua sola y otros trabajadores escucharon vibrar un alero de chapa.

Scremini andaba a caballo, pero no sintió el movimiento ni ninguna vibración. "Se sentía como una tormenta eléctrica que venía lejos", agregó.

Según el veterinario, ante el ruido los animales tampoco se inquietaron, y siguieron tranquilos.

Fuente : El Observador 

Te puede interesar
Lo más visto