Las protestas se intensifican en EEUU con toques de queda impuestos en grandes ciudades

El sábado se produjeron disturbios civiles y se impuso el toque de queda en varias ciudades importantes de Estados Unidos.

Internacionales 31 de mayo de 2020 Victor Camargo Victor Camargo

Cuando los manifestantes salieron a las calles para expresar su indignación por la muerte de George Floyd, un hombre afroamericano que aparecía en un vídeo respirando con dificultad mientras un policía blanco de Minneapolis le ponía la rodilla sobre el cuello.

Desde Los Ángeles hasta Miami y Chicago, las protestas marcadas por la frase “No puedo respirar” -un grito de guerra que hace eco de las últimas palabras de George Floyd- comenzaron pacíficamente antes de volverse turbulentas cuando los manifestantes bloquearon el tráfico, provocaron incendios y se enfrentaron con la policía antidisturbios, quienes dispararon gases lacrimógenos y balas de plástico tratando de restaurar el orden.

La imagen de manifestantes inundando las calles alimentó una sensación de crisis en Estados Unidos tras semanas de confinamiento debido a la pandemia de coronavirus, que ha provocado el despido de millones de trabajadores y ha afectado de forma desproporcionada a las comunidades minoritarias.

En la capital de la nación, cientos de manifestantes se reunieron cerca de la sede del Departamento de Justicia gritando “las vidas negras importan” (black lives matter). Muchos se trasladaron después a la Casa Blanca, donde se enfrentaron a la policía que llevaba escudos, algunos montados a caballo.

El presidente Donald Trump dijo el sábado que si los manifestantes que se reunieron la noche anterior en Lafayette Square, frente a la Casa Blanca, hubieran roto la valla, “habrían sido recibidos con los perros más feroces y las armas más ominosas que jamás he visto”.

 
La Guardia Nacional completa de Minnesota fue activada por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial después de cuatro noches de incendios, saqueos y vandalismo en algunas partes de Minneapolis, la ciudad más grande del estado, y su capital vecina, St. Paul.

El gobernador de Minnesota, Tim Walz, dijo que el despliegue era necesario porque agitadores externos estaban usando las protestas por la muerte de Floyd para propagar el caos.

“Estamos bajo asalto”, dijo Walz en una sesión informativa. “El orden necesita ser restaurado”.

Por otra parte, el Fiscal General de los EEUU William Barr también apunto a los instigadores extremistas, pero él y Walz - ninguno de los dos ofreciendo pruebas para apoyar sus afirmaciones - sugirieron extremos opuestos de la franja política como los culpables.

 
REFLEJO DEL DESCONTENTO NACIONAL

Los activistas por los derechos civiles dijeron que el video del arresto de Floyd el lunes - tomado con el teléfono móvil de un testigo mientras gemía repetidamente “por favor, no puedo respirar” antes de morir - desencadenó un brote de rabia que se ha cocinado a fuego lento por los persistentes prejuicios raciales en el sistema judicial de Estados Unidos.

A su vez, la rápida propagación de las protestas también coincidió con un profundo descontento nacional por la claustrofobia social y la carnicería económica provocada por la pandemia del coronavirus.

REUTERS