Frase de Larrañaga en sede policial: ¿es "un disparate" o está "al borde" de la Constitución?

Los constitucionalistas Risso y Correa Freitas discrepan en si la inscripción viola la laicidad estatal, pero coinciden en que debe saberse quién la autorizó o dio la orden

Nacionales 31 de mayo de 2021 Victor Camargo Victor Camargo
hay orden de no aflojar
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"Se ganó el corazón de la fuerza policial de todo el país", tuiteó el director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Santiago González, junto con la imagen de la sede del Grupo de Reserva Táctica de la Jefatura de Montevideo en cuya fachada estaba inscripta la frase "hay orden de no aflojar" y las iniciales del fallecido ministro Jorge Larrañaga. El anuncio generó opiniones dispares dentro del arco político y de los abogados constitucionalistas: ¿es proselitismo?

Uno de los primeros en exponer este punto de vista fue el diputado colorado Ope Pasquet, quien dijo que entendía el sentimiento de los efectivos, pero aseguró que "no corresponde" pintar "frases de campaña en la fachada de edificios públicos". 

Según dijeron fuentes del Frente Amplio a El Observador días atrás, el tema se tratará este lunes en la reunión de bancada. El viernes por la noche, el diputado del MPP Eduardo Antonini reclamó al ministro Luis Alberto Heber la "inmediata contraorden para retirar la inscripción".

Las opiniones entre los abogados constitucionalistas son disímiles aunque coinciden sobre un punto: lo primero que debe hacerse es averiguar quién ordenó o autorizó la inscripción. "No se puede pensar que eso fue pintado por algunos funcionarios sin autorización de nadie, porque no es creíble que dentro de una dependencia policial pueda pasar eso", expuso el catedrático en Derecho Constitucional Martín Risso en diálogo con El Observador. 

Ruben Correa Freitas, director del Instituto de Derecho Constitucional de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República (Udelar) e integrante del Partido Colorado, expresó a El Observador: "¿Quién en este momento acepta que dio la orden? Entonces no está bien. Si no sabemos quién dio la orden, está mal". 

¿"Hay orden de no aflojar" es una frase partidaria?

La frase insignia de Larrañaga "hay orden de no aflojar" surgió en las revoluciones saravistas y él la había adoptado tras la derrota de 2009 en las elecciones internas contra Luis Alberto Lacalle Herrera, informó El País. 

"Acá entramos en un tema muy vidrioso. Poner este cartel no significa entrar en una actividad proselitista, no se trata de captar adeptos para nada, ni de mejorar el posicionamiento político de la persona que utilizaba esa frase con frecuencia debido a un hecho por todos conocido que es su fallecimiento", entiende Martín Risso. "Consignas puede haber muchas y las puede usar la policía cuando lo entienda conveniente (…) No sé si se puede vincular tanto con un partido político o con la memoria de una persona fallecida. Creo que hay argumentos para los dos lados", opinó.

El jurista Correa Freitas discrepa. "Es una frase muy conocida que usó con sus mandos el ministro Larrañaga, pero que pertenece al caudillo nacionalista Aparicio Saravia. La acabo de ver en la rambla y Luis Alberto de Herrera como una propaganda de un sector del Partido Nacional, entonces, el tema se ha partidizado", argumentó. 

Legislación

Hay normas que prohíben a los funcionarios policiales llevar adelante actividades proselitistas. 

El artículo 58 de la Constitución establece que "los funcionarios están al servicio de la Nación y no de una fracción política. En los lugares y las horas de trabajo, queda prohibida toda actividad ajena a la función, reputándose ilícita la dirigida a fines de proselitismo de cualquier especie. No podrán constituirse agrupaciones con fines proselitistas utilizándose las denominaciones de reparticiones públicas o invocándose el vínculo que la función determine entre sus integrantes".

Por otra parte, el artículo 77 de la Constitución, numeral 4, indica que, entre varios otros funcionarios,  "los funcionarios policiales de cualquier categoría, deberán abstenerse, bajo pena de destitución e inhabilitación de dos a diez años para ocupar cualquier empleo público, de formar parte de comisiones o clubes políticos, de suscribir manifiestos de partido, autorizar el uso de su nombre y, en general ejecutar cualquier otro acto público o privado de carácter político, salvo el voto". 

De infringirse esta norma, la determinación de la pena será competencia de la Corte Electoral. Además, se pasan los antecedentes a la Justicia Ordinaria a los demás efectos.

En otro orden, la ley orgánica policial (número 19.315) legisla en su artículo 36 los deberes inherentes al Estado Policial. Entre ellos, se destaca: "Abstenerse de toda actividad política, pública o privada, salvo el voto, de acuerdo con lo dispuesto en el inciso cuarto del artículo 77 de la Constitución de la República". 

Por último, el artículo 8 de la ley de ética de los funcionarios públicos (número 19.823) expresa que los funcionarios públicos deben "actuar imparcialmente en el desempeño de sus tareas dando trato y servicio por igual a quien la norma señale, sin discriminaciones político-partidarias, de género, religioso, étnico o de otro tipo, absteniéndose de intervenir en aquellos casos que puedan dar origen a interpretaciones de falta de imparcialidad". 

¿La inscripción es un acto de proselitismo?

Está "al borde de la cuestión", dijo Martín Risso. Si bien entiende que para dar una opinión más definitiva es de orden saber quién autorizó u ordenó la colocación de la inscripción, afirmó que "en casos de dudas habría que ampararse en el principio de libertad y comunicación". 

Por otra parte, Correa Freitas no tiene dudas de que se trata de un caso de proselitismo. "No aparece ningún responsable de quién dispuso poner la frase. Es un disparate, es cada vez peor, las cosas en vez de aclararse se oscurecen más todavía", criticó. 

"Cualquier funcionario o grupos de funcionarios va a poner en el Palacio de la Luz una frase del Che Guevara y los funcionarios de la Universidad una frase de Mujica. ¿Entonces, dónde está la laicidad de nuestro Estado? ¿Dónde está el respeto por la no intervención del Estado en los asuntos religiosos y en los asuntos políticos? La función pública no está al servicio de los partidos políticos ni de consignas políticas", afirmó. 

Fuente : EL Observador 

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